Pussy Cat (Evelyne Courtois) comenzó su carrera en Les Petites Souris, quinteto femenino que publicaría un único Ep (Ce n’est pas triste, RCA Victor, 1964) para a continuación disolverse. También compositora, Evelyne permanecería en el sello y adoptaría el nombre de Pussy Cat (en homenaje a la canción What’s New Pussycat de Tom Jones) y por el camino canciones suyas sería interpretadas por, entre otros, Ronnie Bird o Alain Bashung.
Bajo el mencionado nom de guerre lanza en 1966 su primer Ep. Ninguna canción suya, cuatro versiones que van de lo aceptable a lo notable: Ce n’est pas un vie / Sha la la la le, de los Small Faces, Stop de los Moody blues, Le temps ont changé / Have coourage, be careful de los Spokemen y Mais pourquoi / You’re no good a partir de la versión de Dionne Warwick. Un segundo Ep, donde recurre en esta ocasiones a compositores franceses, se edita en julio del mismo año. Ambos pasan sin pena ni gloria.
Hacia finales de 1966 lo vuelve a intentar con un tercero; Dos versiones de Los Hollies (Have you ever loved somebody / Si vous avez déjà aimé y Bus stop / Arrêt d’autobus) y otra de los Herman Hermit’s ( Listen people / J’avais jure) completarán el ep junto a, en esta ocasión sí, una composición original titulada Je te dirai.
Sigue sin suceder nada y decide tomarse un descanso durante todo 1967. Para su vuelta, el año siguiente, opta por grabar su propio material. Lo primero que publica, un single, es algo estupendo, en mi opinión lo mejor que hizo: «Dans ce monde fou», escrita por ella, prueba que tiene talento y es capaz de escribir canciones tan pegadizas y rotundas -o más- como cualquiera que haya versionado. En la cara B, en cambio, otra versión. ¡Y qué versión!. Una toma soberbia, rotunda, de «(You got) The power of love» que los Everly Brothers habían publicado en single en 1966 e incluido en su Lp «In Our Image de ese mismo año. Con texto en francés de Claude Righi y acompañada por la Orquesta de Gèrard Huge todo encaja a la perfección; Comienza con un bajo y una batería abrumador para de inmediato añadir el riff Kinksiano. Guitarras nerviosas, un piano juguetón y el bajo omnipresente completan esta barbaridad irresistible. Tampoco sucederá nada y parece decidir morir con sus ideas, esto es, con sus canciones. Todavía editará un single (Chance / On me dit) y un Ep en el que destaca su versión del She’s Not There de los Zombies (ay, las dudas y falta de confianza que provoca el fracaso) para pasar al ostracismo hasta intentarlo a mediados de los setenta, en plena efervescencia Disco, con el alias de Candy Silver
Sigue sin suceder nada. Todavía haría un último intento en 1969 publicando un postrero Ep con tres composiciones propias («Cette nuit»/»Hymne aus soleil» y «On jou») junto a una versión del «She’s not there» de los Zombies titulada «Te voilà» para a continuación dejarlo.
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